Qué es la EM

Qué es laEM

Tanto si eres afectado como allegado de un recién diagnosticado de esclerosis múltiple, seguramente haya muchos conceptos que se te escapan, como es normal. Por ello, hemos querido facilitar una guía ideal para que tomes un primer contacto con esta enfermedad.

Esclerosis múltiple en números

55.000
Personas afectadas en España
1.800
Casos nuevos en España al año
20-40
Edades de debut más frecuentes
Causa de discapacidad entre jóvenes españoles

Qué es la esclerosis múltiple

La esclerosis múltiple es una enfermedad crónica inflamatoria desmielinizante que afecta al sistema nervioso central.

Cómo se produce y por qué

La causa de la esclerosis múltiple es desconocida, aunque se sabe que afecta a la mielina. La mielina es la envoltura que protege a las fibras nerviosas, permitiendo su correcto funcionamiento. La enfermedad se manifiesta cuando se lesiona esta mielina (las células del sistema inmunológico reaccionan de manera errónea contra estructuras propias del organismo) produciéndose este proceso de desmielinización.

Qué es un brote de esclerosis múltiple

Se define un brote como la aparción de nuevos síntomas o el empeoramiento de alguno previo, que dura más de 24 horas. Los síntomas más frecuentes los puedes encontrar un poco más abajo. Es importante distinguir un brote del llamado pseudobrote. Un pseudobrote se define como el empeoramiento de un síntoma previo en relación al calor, la fiebre o la infección de manera que, al corregir el factor desencadenante, el paciente vuelve a su situación basal.

Tipos de esclerosis múltiple

Dado que la esclerosis múltiple es una enfermedad que no se desarrolla de forma común en todos los afectados, se ha establecido diferentes categorías dependiendo de cómo se presenta la enfermedad y cómo evoluciona.

Esclerosis múltiple recidivante

Remitente-Recurrente (Recidivante)

Le esclerosis múltiple remitente-recurrente es el tipo de EM más común. Aproximadamente el 85 % de las personas con EM son diagnosticadas inicialmente con EMRR. Los síntomas aparecen en episodios llamados brotes. Los brotes pueden recuperarse por completo o dejar secuelas. Se clasifica en dos grupos: activa (si se dan nuevos brotes o hay nuevas lesiones) y no activa (sin brotes ni lesiones nuevas).

Esclerosis múltiple progresiva

Secundaria progresiva

Algunas personas con EM recurrente-remitente, con el paso de los años, desarrollan un empeoramiento neurológico progresivo, relacionado o no con los brotes. Es lo que se llama la fase secundaria progresiva y constituye un tipo diferente de la enfermedad. Otros enfermos, sin embargo, se mantendrán estables durante muchos años sin entrar nunca en esta fase progresiva. Desgraciadamente, a día de hoy, no existe ninguna prueba que nos permita saber "a priori" cómo será la evolución de la enfermedad.

Primaria progresiva

Es menos frecuente y solo afecta al 10 % de todos los pacientes con EM. Se caracteriza por la ausencia de brotes definidos, pero hay un comienzo lento y un empeoramiento constante de los síntomas sin un periodo intermedio de remisión. No hay episodios tipo recidiva, ni periodos de remisión, solo fases de estabilidad ocasionales y mejorías pasajeras poco importantes.

Otras formas de EM

Benigna

La esclerosis múltiple benigna es la forma más leve. Las personas con este tipo de EM tienen una cantidad mínima de discapacidad después de diez años o más, del inicio de la enfermedad. La esclerosis múltiple benigna no puede diagnosticarse en el inicio de la enfermedad ya que solo se hace evidente con el paso del tiempo.

Progresiva recurrente

La esclerosis múltiple progresiva recurrente es el tipo menos común. Es una forma rara de EM que solo acepta al 3 % de las personas diagnosticadas. Este tipo de esclerosis múltiple se caracteriza por una progresión constante de la enfermedad, sin remisiones.

Síntomas más frecuentes

Síntomas iniciales

Los síntomas iniciales más frecuentes con los que se suele debutar en esclerosis múltiple son los siguientes:

Alteraciones de la sensibilidad

Se dan en forma de hormigueo o acorchamiento de una parta de la cara, mano, bazo, pierna y el torso y son el síntoma inicial más frecuente. Si se aprecia pérdida o alteración de la sensibilidad por debajo de una línea horizontal del torso, significa que la lesión está en la médula espinal. Cuando se afecta la sensibilidad profunda, el paciente tiene además problemas para deambular y de coordinación.

Pérdida de visión y visión borrosa

La visión borrosa puede ser debida a una neuritis óptica. Si el síntoma se resuelve al tapar un ojo, la causa de la visión borrosa es la visión doble; en caso contrario, puede ser debido a una neuritis óptica. La neuritis óptica es uno de los síntomas más frecuentes de la esclerosis múltiple, especialmente en su fase inicial y se caracteriza por una disminución de la agudeza visual y un dolor orbitario que aumenta con los movimientos oculares. Suele afectar a un solo ojo y hay una disminución de la percepción de los colores con un tono más apagado.

Debilidad y fatigabilidad

La enfermedad puede ocasionar debilidad o torpeza de los movimientos de las extremidades o una mayor fatigabilidad al hacer las tareas cotidianas. La debilidad es la causa más frecuente de discapacidad de la esclerosis múltiple.

Visión doble y vértigo

La visión doble consiste en la percepción de dos imágenes de un único objeto. La imagen puede ser horizontal, vertical o diagonal. El vértigo es una sensación subjetiva de movimiento de los objetos que nos rodean o de nuestro propio cuerpo, generalmente con sensación de giro. Estos dos síntomas se deben a la afectación de una parte del sistema nervioso central denominado tronco cerebral.

Síntomas durante el curso de la EM

Aparte de los síntomas iniciales ya mencionados, durante el curso de la enfermedad pueden aparecer otros síntomas. Estos son los más frecuentes:

Fatiga

Disfunción sexual

Dificultad para tragar

Trastornos cognitivos

Espasticidad

Síntoma de Lhermitte

Dificultad para articular palabras

Trastornos afectivos

Alteración de los esfínteres

Neuralgia del trigémino

Temblores